Uruguay condena secuestro masivo perpetrado por Boko Haram en Nigeria

Ante un nuevo secuestro masivo perpetrado por Boko Haram, que ha puesto en riesgo la vida de más de quinientas mujeres y niños en la ciudad de Damask en el norte de Nigeria, el Gobierno del Uruguay expresa una vez más su más profundo repudio. El comunicado indica que esta estrategia de terror, es una amenaza a la estabilidad institucional de Nigeria, su integridad territorial y la seguridad de su población.

El comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores, establece que ante un nuevo secuestro masivo perpetrado por Boko Haram, que ha puesto en riesgo la vida de más de quinientas mujeres y niños en la ciudad de Damask en el norte de Nigeria, el Gobierno del Uruguay expresa una vez más su más profundo repudio.

Los reiterados ataques a poblaciones civiles, y en particular a los grupos más vulnerables, no solamente evidencian la lamentable escalada en la frecuencia y virulencia de sus actos, sino también el desprecio de este grupo terrorista por sus connacionales, sometiéndolos al terror y la violación de sus derechos elementales de manera sistemática.

Esta estrategia de terror, que constituye una amenaza creciente a la estabilidad institucional de Nigeria, su integridad territorial y la seguridad de su población, merece la reiteración de la condena por parte del Gobierno del Uruguay, reafirmando que no se reconoce justificativo religioso, étnico, o de ninguna especie que legitime tales actos.

Comunicado:

Ante un nuevo secuestro masivo perpetrado por Boko Haram, que ha puesto en riesgo la vida de más de quinientas mujeres y niños en la ciudad de Damask en el norte de Nigeria, el Gobierno del Uruguay expresa una vez más su más profundo repudio.

Los reiterados ataques a poblaciones civiles, y en particular a los grupos más vulnerables, no solamente evidencian la lamentable escalada en la frecuencia y virulencia de sus actos, sino también el desprecio de este grupo terrorista por sus connacionales, sometiéndolos al terror y la violación de sus derechos elementales de manera sistemática.

Esta estrategia de terror, que constituye una amenaza creciente a la estabilidad institucional de Nigeria, su integridad territorial y la seguridad de su población, merece la reiteración de la condena por parte del Gobierno del Uruguay, reafirmando que no se reconoce justificativo religioso, étnico, o de ninguna especie que legitime tales actos.