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El Gobierno de Canelones, junto a autoridades nacionales, presentó el trabajo que se comenzó a realizar en la faja de defensa de costas para la restauración del sistema costero y barra del arroyo Solís Chico, en el balneario Parque del Plata.
Esta iniciativa se concreta luego de que en setiembre de este año la Intendencia de Canelones presentara un proyecto, por el que se obtuvo la correspondiente autorización de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA), cerrando una etapa de varios meses de trabajo articulado entre el Gobierno de Canelones, el Municipio de Parque del Plata, DINAMA y organizaciones de vecinas y vecinos de la zona.
Las acciones previstas en el proyecto se dividen en tres y se ejecutarán en forma coordinada y simultánea hasta terminar los trabajos previstos.
Por una parte, la apertura de canal; que implica que en la desembocadura se realizará la apertura de un canal de unos 40 m de ancho, con el doble propósito de facilitar que el agua del arroyo se desplace por la nueva desembocadura e interrumpir la corriente por el actual canal. El sitio de la apertura ha sido seleccionado a partir de imágenes antiguas del lugar donde durante varios años existió la desembocadura y por la información presente en el trabajo del Instituto de Mecánica de los Fluidos e Ingeniería Ambiental (IMFIA), en su Estudio de la Desembocadura del Arroyo Solís Chico (2012).
El Director General de Gestión Ambiental, Leonardo Herou señaló que se trata de una intervención compleja, que se viene preparando hace mucho tiempo con un dialogo fluido con el gobierno nacional analizando la situación que se ha generado, donde la deriva del arroyo ha implicado una pérdida del apoyo muy importante de Parque del Plata, donde entre otras consecuencias ha sido la invasión de arena hacia la rambla.
Estas intervenciones implican devolver la arena a la playa, buscando recuperar varios metros de playas, y luego se van a realizar una serie de cercas que buscan mantener las dunas. La dinámica costera con el impacto del clima y la urbanización que hemos generado en la costa nos genera presiones que nos obliga a estar atento, lo que implica seguir gestionando esta zona, consolidando los cambios que se están realizando.
La inversión de las obras a realizarse, implican un costo de 10.000 US$, según anunciaron autoridades nacionales.
Por otra parte, se realizarán movimientos de arena de la rambla y médanos en tramos desde la Rambla y Calle 12 hasta Rambla y Calle 26. Se irá desplazando la arena de los médanos –estimada en unos 20.000 m3– que está depositada sobre la rambla y otros 50.000 m3 de los médanos más altos. Este volumen de arena se llevará al área de playa y al canal de descarga actual, realizando una concentración de esfuerzo en tiempo y volumen desplazado. Se utilizará una máquina de alto vacío que succiona arena en seco, y mediante mangueras de ocho pulgadas la traslada hacia los sitios solicitados, contando con apoyo de maquinaria vial, pala cargadora, etcétera.
Y finalmente se realizarán actividades complementarias; propiciándose el desarrollo y estabilización de geoformas costeras recomponiendo médanos con estabilización de taludes y con cercas captoras y formas de playa. Las cercas captoras se realizarán utilizando restos de podas y raleos en un proceso que además busca evitar que continúe el desplazamiento eólico de la arena superando la altura de las cercas. Luego se plantarán especies psamófilas. Se complementarán los trabajos destapando pluviales y se facilitará su desagüe hacia zonas bajas en los antiguos lugares donde estaban los humedales.
Estas acciones aportan una solución que no implica una alteración de la dinámica costera, sino que significan restablecer una situación anterior sin realizar obras duras, justamente porque las condiciones y la configuración actual del sistema lo permiten.
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