El principal desafío es mejorar condiciones del sector productivo para generar más inversión, exportaciones y empleos

La ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, y el canciller, Francisco Bustillo, encabezaron este miércoles 29 un encuentro con representantes de las cámaras empresariales y gremiales vinculadas a la producción, en el que subrayaron la necesidad de trabajar en conjunto para retomar el crecimiento económico del país.

Del encuentro realizado en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores, además de las autoridades ministeriales, los ministros Azucena Arbeleche y Francisco Bustillo, y los respectivos subsecretarios Alejandro Irastorza y Carolina Ache, participaron representantes de las principales cámaras y gremiales del sector productivo.

Entre ellas estuvieron la Asociación de Cultivadores de Arroz, la de Industriales Laneros Exportadores, la de la Industria Frigorífica y la Asociación Rural del Uruguay.

También representantes de la Cámara de Industria Frigorífica, de la Industria Láctea, de Industrias del Uruguay, de Industrias Pesqueras del Uruguay, de Industrias Procesadoras de Madera, de la Construcción, Mercantil de Productos del País, de Comercio y Servicios, de Tecnologías de la Información, de Turismo, y de Zona Francas. 

Asimismo la Comisión Honoraria de Desarrollo Apícola, la Federación Rural del Uruguay, la Gremial de Molinos Arroceros, el Instituto Nacional de Carnes, el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria, el Instituto Nacional de la Leche, de Logística, de Vitivinicultura, la Sociedad de Productores Forestales y la Unión de Exportadores del Uruguay.

En su intervención, la ministra de Economía Azucena Arbeleche comenzó aclarando que “vamos a trabajar en forma muy conjunta con la Cancillería. Es un equipo que intenta escuchar cuál es la realidad el país y que intenta a partir de esas inquietudes dar resultados concretos”.

“El principal mensaje que queríamos transmitir es que aquí hay dos ministerios, la Cancillería y el Ministerio de Economía y Finanzas, que están trabajando de forma conjunta para reactivar la economía. Para que tengamos más crecimiento, más exportaciones, más inversión. En definitiva, más empleo, que es lo que nos desvela a todos como hacedores de política y es lo que al final va a lograr que la sociedad toda esté en una mejor situación”, subrayó.

“Durante todo este tiempo hemos estado trabajando desde Economía para atravesar la pandemia que muy tempranamente a la nueva administración le tocó.

Fue un trabajo muy profundo desde el punto de vista económico para diseñar el rumbo a seguir. Fueron días de mucho análisis, el 18 o 19 de marzo estábamos anunciando medidas económicas y el concepto de que los motores de la economía no se pueden apagar.”

Y prosiguió diciendo: “aquí está representada buena parte de los motores de la economía; no todos, pero sí en estas cámaras está representada una parte importante del sector productivo y es su responsabilidad que esos motores sigan funcionando.

El principal instrumento donde apostamos todo fue al mantenimiento de la liquidez para ayudar al sector a transitar por esa epidemia”.

“Ahora desde Cancillería y desde Economía nos toca tener una mirada más elevada y trabajar para esa reactivación económica. Y esa reactivación económica se va a dar en la medida en que el sector productivo tenga el apoyo del Economía y de Cancillería. Y aquí insisto con el tema de los resultados: ni la Cancillería ni Economía se va a sentir mejor porque tengamos más acuerdos firmados que no nos conducen a nada, o porque tengamos un menor déficit fiscal que no nos conduce a nada. No podemos confundir los instrumentos con los resultados. Tenemos herramientas, pero son simplemente eso, herramientas que van a servir para que el sector productivo saque adelante al país y esto se transmita en mayor crecimiento y en mayor empleo.”

“Esta mirada más estructural es sobre la que estamos trabajando juntos; esta mirada es la que está plasmada en la ley de urgente consideración que ya es ley, es la que está plasmada en las discusiones que estamos teniendo en la ley de presupuesto, y en distintas discusiones que estamos manteniendo.

Aquí lo importante es no quedarnos solamente con la mirada de transitar esta coyuntura, porque estamos lejos de haber pasado la pandemia y las perillas sanitarias y económicas las estamos manejando todos los días. Es importante transmitirles que desde nuestro lugar estamos con esa mirada más estructural y que estamos trabajando conjuntamente”, expresó la secretaria de Estado.

“En el tema particular de inserción económica internacional, los temas son diversos. Tenemos una gran oportunidad con la Presidencia Pro Témpore del Mercosur para sellar el tratado con la Unión Europea (UE), pero oportunidad para internamente los países resolver asuntos que aún están incompletos. Ahí insisto en el concepto del canciller: tenemos que trabajar internamente en los países e internamente como país Uruguay. Ahí es donde hay un trabajo bien claro desde Economía y desde Cancillería.”

“Tenemos muchos temas que aún como país no hemos resuelto, que si no lo los resolvemos internamente es difícil que podamos hacerlo a nivel de nuestros socios comerciales. Y ahí también el mensaje es claro: a quien sea que ustedes se acerquen en el equipo de Economía o en el equipo de Cancillería, nosotros trabajamos a nivel de quienes tenemos la mayor responsabilidad y también a nivel de quienes tenemos en los equipos de forma conjunta. No es problema ‘se lo dije a Economía pero no a Cancillería’, tengan la tranquilidad de que los temas se trabajan de forma conjunta.

Importa la región, decía el canciller, pero también importan los mercados más lejanos. En eso también estamos trabajando”, indicó Arbeleche.  

Unión Europea y también la mirada más allá de la región

“Ayer mantuvimos una reunión con el Banco Asiático (de Inversiones en Infraestructura, AIIB por su sigla en inglés): es la primera vez que Uruguay participa como miembro pleno. Es importante porque es la señal de que no solamente queremos estar en la región, no solamente es el tratado con la UE; es mirar a Estados Unidos, es mirar a Asia, es llegar a todos los mercados. No porque queramos llevarnos una medalla de llegar a todos los mercados, es porque tiene que haber resultados concretos de parte del sector productivo”, remarcó la ministra.

“Los dos andariveles tienen que ir de la mano: la inserción comercial -que puede darse a partir de distintos instrumentos- y -lo que es estrictamente económico- la competitividad.”

“¿Cómo se mide? Hay distintas mediciones, que van a depender de cada sector. A nivel de la economía global podemos hablar del tipo de cambio real y en definitiva precios relativos de Uruguay con el resto del mundo. Y podemos también tomar en cuenta la medición del tipo de cambio real y -algo bien de economistas- cuáles son los fundamentos, o ir a algo bien simple: tipo de cambio real en el tiempo: donde se ubicó y donde nos ubicamos ahora. Seguimos con un gap (intervalo vacío entre dos cotizaciones consecutivas) importante, en el entorno del 25 por ciento con respecto a la serie histórica.”

“¿Cómo abordar eso? –se preguntó la ministra–. Ahí es donde entra lo estructural y ahí es donde tenemos que tener la mirada a mediano plazo, y es lo que venimos haciendo con estos instrumentos sobre los que hablamos.”

“El tema también tiene que ver con las empresas públicas: necesitamos tarifas públicas que estén más adecuadas con los precios de la región; necesitamos una gobernanza distinta para las empresas públicas: una gestión distinta, unos canales de funcionamiento de los mercados diferente y en esto en la ley de urgente consideración hay varios temas que tienen que ver con los organismos reguladores de estos mercados. Necesitamos una infraestructura diferente. Claro que los costos de trasladar la mercadería internamente en un país pequeño son altos porque la infraestructura no es la adecuada y tenemos un desfasaje de lo que necesitaríamos hoy para trasladar la mercadería. En eso venimos trabajando con el Ministerio de Transporte de Obras Públicas y con la Corporación Nacional para el Desarrollo, acerca de cómo ese plan de obras se plasma en la ley de presupuesto.”

“También debemos enfocar con la cartera de Trabajo cómo tenemos que plantarnos y en el mercado laboral cuáles son las prioridades. Eso también tiene que ver con lo estructural: la prioridad es el empleo, es que los cambios y las mejoras en productividad se plasmen en mejoras salariales. Desde que estamos atravesando una situación crítica como la actual, hemos hecho foco en mantener el empleo.”

“También hace a la competitividad mucha de la burocracia que ustedes enfrentan. Trámites internos que tienen que hacer, pedidos que se superponen, etc. Estamos trabajando con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) para simplificar toda la tramitación que tiene que recorrer cada uno de los emprendedores, independientemente del tamaño. Eso hace a la competitividad.”

“Y quizás el último punto que hace a la competitividad es lo fiscal, que en última instancia está chupando recursos que no se están liberando para tareas productivas. Ahí también es lo que vamos a estar presentando en la ley de presupuesto: la mejora fiscal pero no de forma caprichosa, de forma de que el sector productivo independientemente del tamaño, quien emprenda y quien lleve adelante una producción de bienes o servicios, comercial, tenga el respaldo que necesita del Estado y que no tenga las trancas que ha tenido hasta ahora.”

“La gran apuesta en la competitividad va por lo estructural y estamos trabajando en distintos tipos de legislación.”

“En cuanto a la inserción económica internacional, este tema tiene que ver con exportaciones de bienes pero también -sin dudas- con las exportaciones de servicios. Y ahí la mirada nuestra, de Cancillería y de Economía, pero también de los ministerios sectoriales como Industria, Ganadería, Turismo, sobre la no separación de las tecnologías de la información, de los servicios con los bienes, y sí pensar en una integración”, indicó.

“Si somos buenos en producir carne y en producir arroz, hay agregarle la tecnología para que potencien mucho más los productos. Las tecnologías de la información pueden ayudar a dar un empuje a nuestros bienes tradicionales.”

“También cuando hablamos de inserción económica internacional hablamos de inversión. La inversión no es solamente la extranjera, también es la que se hace a nivel local. Hemos trabajado en algunos cambios en la reglamentación de la COMAP, hemos trabajado en los decretos para las grandes inversiones, y lo que está próximo a salir es una reglamentación de la COMAP que tiene que ver con la inversión.”

“Aquí lo importante son los resultados. No nos vamos a poner contentos porque firmemos más acuerdos que no tengan resultados. Los acuerdos de doble tributación los iremos analizando en la medida que el tratado vaya a tener una aplicación concreta en lo inmediato. Si no vemos resultados en materia de inserción, de exportaciones, de crecimiento, de empleo, estamos firmando papeles que no son los correctos”, finalizó la ministra.

Por su parte el subsecretario de Economía y Finanzas Alejandro Irastorza indicó que “próximamente, a mediados de agosto, va a estar el nuevo decreto de COMAP. Viene a ser el viejo decreto 455 del 2007 actualizado, mejorado, con materia indicadores, exportaciones, generación de empleo, descentralización. Se mantienen algunos beneficios transitorios que hemos tratado en este año, como promoción del tema de las Pymes que a veces no estaban comprendidas. Hicimos supuestos con determinados proyectos, los beneficios de IRAE, de renuncia fiscal, que son importantes y le van a dar una buena mano a las empresas”.

“Como habrán visto ayer tuvimos una reunión con el presidente del Banco de Previsión Social que se vio reflejada en la prensa. El BPS por el efecto COVID va a tener unos 540 millones de dólares por baja de recaudación y seguros de desempleo que va a tener que pagar. A pesar de ese número que impacta porque es proyectado para 2020, igual estamos dispuestos a aprobar esta renuncia fiscal para desarrollar la actividad, generar empleo y mover la economía”, señaló Irastorza.