Presidente Vázquez convocó en la ONU a una alianza mundial por la salud y la vida.

“Desde esta tribuna convocamos a países, gobiernos, pueblos, organizaciones no gubernamentales y a asociaciones científico-médicas a integrarnos en un foro contra la epidemia de las enfermedades no transmisibles, una gran alianza mundial”, dijo el Presidente Tabaré Vázquez al hablar este martes 20 en la Asamblea General de la ONU. “Es posible diseñar estrategias muy positivas para luchar por la vida y la salud”, enfatizó.


Pocas horas después de comenzar la sesión de exposiciones de los más de 135 jefes de Estado y de gobierno de los países miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el Presidente Vázquez hizo un llamado a conformar una gran alianza mundial por la salud y la vida.

“No es fácil, pero es posible y para ello se requiere convicción y voluntad política, para que esa alianza sea, en muchos aspectos, una alianza por la vida saludable, tan amplia, vigorosa y dinámica como sea posible”, agregó en otro tramo de su alocución, en la que también se ocupó, entre otros tópicos internacionales, de felicitar al gobierno y la guerrilla de Colombia por firmar la paz tras más de 50 años de conflicto interno armado.

El mandatario uruguayo ocupó el estrado de la 71.° Asamblea General de la ONU, poco después del mediodía, precedido por once oradores, entre los que se incluyó el director general del foro mundial, Ban Ki-moon, y los presidentes Mauricio Macri, de Argentina; Michel Temer, de Brasil; y Barack Obama, de Estados Unidos.

“La tarea de los gobernantes, la que nos encomendó la ciudadanía, no puede ser sólo diagnóstico, sino que el deber prioritario e inexcusable que tenemos es crear condiciones para que los pueblos construyan su vida en sociedad y acompañarlos en esa tarea”, comenzó señalando Vázquez al puntualizar la obligación que conlleva el cargo.

Vázquez se refirió, ya entrando en el tema del combate a las enfermedades no transmisibles, a los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) al respecto, como el cáncer, afecciones cardiovasculares, diabetes y patologías pulmonares crónicas, que constituyen la principal causa de mortalidad en el orbe, sobre todo en países con ingresos medios y bajos.

"Estas enfermedades, evitables, se deben en gran medida a cuatro factores de riesgo directamente vinculados a comportamientos típicos de la modernidad, que son el tabaquismo, el alcoholismo, la mala dieta y el sedentarismo", detalló.

Los sectores de medios y bajos ingreso son los más expuestos a estos problemas, aseguró. “La pobreza expone a la gente a factores de riesgo de las enfermedades, y éstas tienden a agravar la condición de la familia afectada”, sostuvo.

Ante esta realidad, indicó que los sistemas sanitarios sufren el impacto de los altos costos de estas enfermedades y, como contrapartida, los productos que inciden en su proliferación, normalmente tienen una carga impositiva baja.

En América Latina y el Caribe, por ejemplo, se estiman en 33.000 millones de dólares el costo directo que causa el tabaquismo sobre los sistemas de salud nacionales, equivalente a 0,5 % de su producto interno bruto y a 7 % del gasto anual en salud. En cambio, los impuestos sobre el tabaco solo llegan a cubrir 50 % de esos gastos, puntualizó.

“Se estima que en 2009 el costo global del cáncer en América Latina se ubicó en 286.000 millones de dólares en concepto de costo directo, consulta y estudios, e indirectos, como pérdidas de días laborables, gastdos de trasladoa, alojamientos, y otros”, señaló.

“A menos que se combata este problema de modo enérgico en los países más expuestos o afectados, el impacto de estas enfermedades seguirá acentuándose y el plausible compromiso mundial de reducir la pobreza como condición para el desarrollo sostenible, más que acercarse, se alejará cada día más de nuestras posibilidades”, advirtió.

A modo de ejemplo de lo que afronta el mundo en este asunto, Vázquez expuso un dato dramático en otro tramo de su discurso y es que habrán muerto en el orbe 104.109 personas como consecuencia de las enfermedades no transmisibles.

“Entonces, cómo no diseñar y ejecutar estrategias que controlen el consumo de alcohol y tabaco y promover dietas sanas y el ejercicio físico”, añadió.

Así, si no se toman “medidas acertadas, nuestros países, sobre todo los más humildes, sufrirán dramáticas consecuencias por estas enfermedades que pueden ser evitadas”, alertó..

“Este no es un ateneo médico, pero, como gobernante, permítanme expresar que no solo es posible diseñar estrategias, sino que obtienen resultados muy positivos, que son imprescindibles”, sentenció el mandatario uruguayo.

Por eso, enfatizó: “Convocamos a los países, gobiernos, pueblos, organizaciones no gubernamentales y a asociaciones científico-médicas a integrarnos en un foro contra la epidemia de las enfermedades no transmisibles, una gran alianza mundial”.

Precisó luego que Uruguay es líder de implementación del convenio marco contra el tabaquismo, liderazgo que no estuvo libre de resistencias, como la frustrada demanda presentada contra el país por la empresa transnacional tabacalera Philips Morris.

“Más allá de los argumentos de esa empresa, su razón fundamental era castigar a un pequeño país que se había propuesto controlar el consumo de tabaco”, precisó Vázquez en referencia al peso que debió afrontar Uruguay ante el tribunal, que a la postre le dio la razón con un fallo contundente contra la Philips Morris.


Presidencia.

Comentarios