“Para consolidar conquistas sociales de los últimos años es necesario mantener el orden macroeconómico y fiscal”.

El subsecretario de Economía y Finanzas, Pablo Ferreri, sostuvo en declaraciones a la prensa que para mantener las conquistas sociales el Ejecutivo propuso algunas medidas de consolidación fiscal. Consultado sobre las razones por la cual los últimos Gobiernos no realizaron mayores ahorros, aseveró que el país tenía una deuda social muy importante, con una pobreza que alcanzaba al 40 % de la población y una indigencia de 6 %.

El subsecretario de Economía y Finanzas, Pablo Ferreri, compareció este lunes 15 en la Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda de la Cámara de Senadores, instancia en la que realizó una presentación sobre la Rendición de Cuentas y Balance Presupuestal del Ejercicio 2015.

Consultado sobre las perspectivas de la economía nacional,  el subsecretario  consideró que  Uruguay se destaca en la región porque continúa creciendo, aunque de “manera moderada en este año 2016”.

 Ferreri resaltó que agentes nacionales e extranjeros expresan confianza sobre el comportamiento de la economía  en el futuro. Al respecto, destacó la colocación que ha realizado Uruguay en las pasadas semanas de deuda pública, cuando la demanda quintuplicó la oferta realizada por el Gobierno. También destacó que la empresa UPM trabaja con el Ejecutivo para ejecutar la mayor inversión de su historia, lo cual impactara de forma positiva en los niveles de actividad.

Agregó que para consolidar los logros y conquistas sociales realizadas en los últimos años es necesario tener orden macroeconómico y fiscal: “Es por ello que con mucha prudencia estamos planteando algunas medidas que pretenden consolidar fiscalmente los números de la economía”. Al respecto añadió: “Uruguay es el país de todo el continente que menor incremento del gasto público tuvo”.

Consultado sobre las razones por la cual los últimos Gobiernos no realizaron mayores ahorros, el jerarca aseveró que el país tenía una deuda social muy importante, con una pobreza que alcanzaba al 40 % de la población y con un nivel de indigencia situado en el  6 %. “Atender esa emergencia social y mejorar la condiciones de vida de los uruguayos llevó a tomar decisiones sobre el gasto público social, sobre todo salud, vivienda y educación”.