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Ministerio del Interior contará con 3.000 cámaras de seguridad en Montevideo y Canelones.

“Instalaremos 2.000 cámaras de seguridad en Montevideo y más de 1.000 en Canelones para reforzar el sistema de videovigilancia que monitorea las 24 horas”, informó el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, quien recordó que "a mediados de 2015 habían 1.110 en la capital" uruguaya. En su exposición en la Asociación de Dirigentes de Marketing, agregó que también hay vigilancia área para aumentar la seguridad ciudadana.
“Con el afán de brindar mayor seguridad a los ciudadanos, se comenzó a patrullar el cielo uruguayo con 'El Águila 1', un avión Cessna C182Q que forma parte de la Unidad Aérea de la Policía Nacional, drones y tres helicópteros que estarán prontos a fin de año”, subrayó Bonomi, quien fundamentó su presentación en la temática “Es posible erradicar la inseguridad”.

“Incorporamos el sistema de videovigilancia como parte de la estrategia de seguridad pública, para monitorear las 24 horas con personal capacitado, y en el futuro se prevé instalar en Montevideo otras 2000 cámaras y más de 1.000 en Canelones, a la vez que se hará lo propio en otras localidades del interior del país”, indicó.

Como parte de las nuevas políticas de seguridad, el jerarca mencionó las mejoras en la calidad de los registros y documentos de identificación civil.

“La emisión de la nueva cédula de identidad constituye un paso fundamental del gobierno electrónico. Esta cédula no se puede duplicar, ya que está hecha de policarbonato, un material que no se deslamina. También posee un chip que habilita la identificación, firma electrónica y verificador de huella digital”, valoró.

En ese sentido, también se explayó sobre la implementación del nuevo pasaporte, que incluye un chip electrónico en su tapa, donde figurará toda la información recomendada por la Organización Internacional de Aviación Civil aportando así mayor seguridad y credibilidad al pasaporte.

“Todos estos cambios reseñados y muchos otros implementados o en proceso constituyen los cimientos de lo que hemos denominado la 'nueva policía'”, subrayó Bonomi.

“Y es nueva porque está basada en un modelo de gestión diferente al que se caracterizaba por el trabajo individual, la baja movilidad de recursos, la diversificación del mando, el patrullaje aleatorio según el conocimiento empírico de cada comisario, altos tiempos de respuesta ante emergencias, falta de disciplina operativa, baja eficiencia entre la cantidad de detenidos y procesados y un crecimiento constante del delito”, describió.

“En suma, era una policía orientada a intentar reprimir el delito una vez que ya había sucedido”, puntualizó.

En cambio, “hoy la nueva policía tiene como foco la prevención del delito, mide su éxito en función de la baja del delito, porque una sociedad más segura es aquella donde ocurren menos hurtos, rapiñas, homicidios, hechos de violencia doméstica y lesiones personales entre otros crímenes. Una sociedad más segura es aquella que evita que ciertas cosas sucedan”, afirmó.

“Por ese motivo, es que nos propusimos como meta en la gestión de gobierno una baja sustantiva en los delitos contra la propiedad en Uruguay y, en particular, una estrategia específica para combatir las rapiñas”, añadió Bonomi.  

“Este objetivo lo pudimos diseñar porque se hicieron transformaciones que permitieron que hoy la nueva policía esté preparada y orientada para lograr esos resultados”, concluyó en su disertación.

Presidencia.

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