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Doce niños de la escuela N°197 para sordos de Montevideo visitaron al Presidente Tabaré Vázquez en la Residencia de Suárez y Reyes. El mandatario compartió un rato con ellos en el parque, recibió sus propuestas para mejorar la comunicación con el sector de la población que representan y expresó su compromiso por avanzar por la inclusión de un intérprete en lengua de señas en la televisión pública.
Cerca del mediodía un grupo de alumnos de la escuela N° 197 de Montevideo para niños con discapacidad auditiva y con alteraciones del lenguaje llegaron a la Residencia de Suárez y Reyes para reunirse con el Presidente de la República, Tabaré Vázquez, quien los recibió en el parque de la casa, más precisamente en el rosedal. Allí los niños intercambiaron con él, mediante su lengua de señas y con intérpretes de por medio.
La iniciativa se originó en el marco de un proyecto de escritura, donde tuvo lugar un debate sobre los derechos de los niños sordos, a partir de la ley que aprueba la lengua de señas como la lengua oficial de las personas sordas. Escribieron una carta con un destinatario elegido por ellos: el Presidente Vázquez, y solicitaron a sus docentes que les gestionaran una entrevista en persona con él para poder entregársela.
La directora de la escuela, Alicia Oviedo, las maestras, la intérprete y la inspectora, quienes acompañaron al grupo, resaltaron la expectativa que tenían los niños por conocer al mandatario y por recorrer la casa presidencial.
Entre abrazos y sonrisas, en un intercambio distendido y al aire libre, el Presidente les pidió que le narraran el motivo de su visita. Los niños le consultaron sobre la posibilidad de incluir un intérprete en lengua de señas en los programas de televisión, dado que sino ellos se sentían excluidos de estos espacios de comunicación visual.
El mandatario se comprometió a trabajar en el tema, a avanzar en una reglamentación para que esto se concrete en la televisión pública (Televisión Nacional, que actualmente presenta este servicio en la emisión de informativos, y TV Ciudad) y, en una segunda etapa ,evaluar la posibilidad de extenderlo a los programas educativos e ilustrativos de los canales privados.
“Los niños vinieron a expresar en su propia voz, algo que todos los ciudadanos hacen naturalmente. El Presidente tuvo el tiempo y la sensibilidad de ponerse en su lugar”, aseguró Oviedo.
En el encuentro también se resaltó la necesidad de articular mejor entre salud y educación, para que cuando un niño sea detectado sordo, su familia disponga de la información necesaria para recibir ayuda y apoyo educativo. En este sentido, si bien hay cuatro escuelas para sordos en el país, en cada departamento trabaja personal disponible para la atención de niños con problemas auditivos en las escuelas.
Al finalizar el intercambio, el Presidente invitó a los niños a una merienda y les ofreció las canchas de la residencia para que organicen un campeonato de fútbol mixto, porque explicó que estos espacios son de los uruguayos y tienen derecho a disfrutarlos.
Los alumnos de la escuela N° 197 recorrieron por dentro la casa principal, así como el parque en su totalidad. Sus rostros expresaban satisfacción por el cúmulo de información registrada que luego compartirían con el resto de sus compañeros.
“Ellos observaban detalle a detalle la investidura del Presidente, la residencia, el trabajo de Vázquez, las personas que le rodean y el tipo de cosas que hay en la casa, porque serán quienes le cuenten a sus pares, en su propia lengua, la experiencia. Esto será recibido de una manera diferente a lo que pueda narrar un oyente”, dijo la directora.
También explicó que el registro “de primera mano” es fundamental para las personas sordas, "porque todo lo que importa es lo que tienen delante de sus ojos".
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