Bergara: “Vender dólares a 29 pesos comprados a 19 permite al BCU reducir su deuda”

La estabilidad financiera es el gran desafío del Gobierno en momentos en los que el dólar se fortalece en el mundo, señaló el presidente del Banco Central del Uruguay (BCU), Mario Bergara. De ese modo justificó la participación de la entidad en el mercado cambiario y aseguró que, más que bajar las reservas, se pudo reducir la deuda en letras de regulación monetaria de 10.000 millones de dólares a menos de 6.000 millones.

El BCU trabaja con los mismos criterios de años anteriores y, aunque las circunstancias son cambiantes, la lógica de objetivos es la misma, es decir procurar la estabilidad de precios que es la base para la estabilidad financiera del país, explicó Bergara en rueda informal de prensa tras su participación este viernes en la segunda y última jornada del XIII Seminario de la Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones (FIAP).

La participación de la entidad en el mercado cambiario obedece a esa razón, reiteró el jerarca, para luego agregar que en “estos momentos también inciden otros factores, como la volatilidad regional, que Uruguay intenta no acompañar”.

“Tratamos de tener una participación en el mercado, separando los factores estructurales de los circunstanciales, algo que es muy difícil de medir, pero creemos que es el mejor criterio”, añadió.

“El jueves el dólar se fortaleció en todo el mundo y Uruguay no fue la excepción; no hay una ciencia exacta para actuar, hay mucho de percepción”, precisó.

Por otro lado, el titular de la entidad bancaria emisora aseguró que las reservas de divisas del país, luego de las intervenciones del BCU siguen siendo muy sólidas. En este último tiempo se han vendido unos 1.800 millones de dólares, pero, por otro lado, entre 2008 y 2013 se habían comprado 5.500 millones.

Este fenómeno hace que el BCU reduzca su deuda, generada cuando se compraron dólares a 19 pesos la unidad y ahora se deshace esa deuda vendiéndolos a 29.

“Las letras de regulación monetaria hace muy poco rozaban los 10.000 millones de dólares y hoy están por debajo de los 6.000 millones. O sea que mucho más que lo se ha reducido las reservas se ha bajado la deuda del BCU y esto es posible porque el Gobierno actuó responsablemente”, subrayó.

Advirtió, además, que cuanta más turbulencia y volatilidad haya en los mercados cambiarios de la región más participación tendrá el BCU para que el proceso de fortalecimiento del dólar se asuma de la manera “menos ruidosa y volátil posible”.   

Bergara reflexionó sobre la situación derivada de la decisión de la Reserva Federal (banco central) de Estados Unidos de mantener las tasas de interés en 0, o en Brasil, donde nadie hubiera dicho hace poco tiempo que su economía fuera a caer más de 3 % este año.  

Participación del BCU en FIAP

El titular del BCU recordó que hace menos de dos décadas que Uruguay pasó a trabajar con un sistema de seguridad social mixto, en el cual sumó la capitalización individual a la de reparto solidario estatal. “Creemos estar avanzando en la dirección correcta porque los resultados comienzan a mostrarlo así”, dijo en su exposición ante el seminario que finalizó este viernes en un hotel céntrico de Montevideo.

Aseguró que el banco contribuye en el proceso de maduración de este sistema, porque su rol es brindar garantías de que las administradoras de fondos de pensión y las empresas de seguros que manejan los ahorros de los trabajadores cumplan con lo pactado.

Las empresas de seguro tienen un rol creciente y en ese sentido el BCU presentó un proyecto de ley que aún está a estudio, en el cual se enfoca la regulación de estas empresas para incrementar las garantías que se ofrecen asegurando que el ahorro de todos los trabajadores se transforme en su posterior pensión.

Por otro lado, Bergara comentó que, con el fin de promover el ahorro previsional y la educación económica, la entidad a su cargo realiza acciones como el programa “BCU educa”, que contribuye a la difusión y comprensión de las temáticas económicas y financieras, en el convencimiento de que éstas deben incorporarse como un ingrediente natural en la vida cotidiana.