UNASEV apuesta a un 5º año sin siniestros viales de gravedad en la Noche de la Nostalgia

El secretario general de la UNASEV, Pablo Inthamoussu, repasó las principales medidas de control y fiscalización con las que contará el organismo el próximo 24 de agosto en ocasión de la Noche de la Nostalgia. La Policía Caminera dispondrá de 100 puestos de control y 200 efectivos para la noche, mientras que los policías de tránsito de los gobiernos departamentales completarán la totalidad del territorio nacional.

El secretario general de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (UNASEV), Pablo Inthamoussu, en diálogo con la Secretaría de Comunicación, hizo un repaso de los controles previstos para el próximo 24 de agosto en ocasión de la Noche de la Nostalgia.

Según explicó el jerarca, culminada la etapa previa de difusión, comunicación y prevención en el marco de la campaña que lleva el lema “Divertite de principio a fin, si tomó no dejes que maneje”, la UNASEV se encuentra ahora ultimando detalles en todo el territorio en materia de control y fiscalización. “En algunos departamentos, como en Montevideo, esta etapa ya comenzó”, agregó.

Inthamoussu detalló que la Policía Caminera contará con 100 puestos de control y 200 efectivos para la noche, que se suman a las restantes autoridades encargadas del control y la fiscalización en todo el país.

De esta manera, la UNASEV pretende dejarle en claro a la población “que si más allá de toda la difusión y la prevención que se ha realizado persisten en la conducta de ingerir alcohol y conducir un vehículo, hay una gran probabilidad de que sean detectados por este tipo de controles”, afirmó Inthamoussu.

En otro orden, el jerarca reconoció que el organismo tiene altas expectativas respecto a los resultados, y expresó que “gracias al trabajo y la concientización que se ha hecho sobre la población, desde hace 4 años no hemos tenido que sufrir ningún siniestro vial con fallecidos y tampoco siniestros viales de gravedad durante la Noche de la Nostalgia”.

El secretario general de la UNASEV enfatizó en la necesidad de insistir en que “más allá de todos los dispositivos y todos los controles, el principal actor es el propio ciudadano”, y añadió: “creemos que ya nadie puede decir en Uruguay que desconocía la incompatibilidad del alcohol con la conducción de vehículos”.

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