Bonomi: exetarras hacen vida normal en Uruguay

El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo que los tres ciudadanos españoles que integraron la banda terrorista ETA, dos de ellos con causas abiertas en la Justicia de España, realizan una vida "absolutamente normal" en Uruguay.

En la Cumbre de Ministros del Interior de Iberoamérica que se realizó en Valencia los días 17 y 18 de setiembre, el gobierno español le trasmitió a Bonomi el interés de España en mantener "controlados" a los exmiembros de ETA en América Latina y su intención de llevarlos ante la justicia de ese país.

Bonomi mantuvo el jueves un encuentro con el embajador español en Uruguay, Roberto Varela Fariña, en un evento sobre "Empleo y Formación en el Sistema Penitenciario" que se realizó en el Centro de Formación de la Cooperación Española. En la oportunidad, Bonomi confirmó la información publicada por El País en cuanto al interés de España por contar con la colaboración de Uruguay para impedir que los tres exmiembros de ETA que residen en el país realicen proselitismo político.

Bonomi dijo que había un "error" en lo informado por El País y negó que exista un pedido de extradición por uno de los terroristas. El País informó que España tiene identificados en Uruguay a Jesús Lariz Iriondo, Amaya Araquistáin y un tercer ciudadano que no fue identificado. Los dos primeros tienen causas abiertas en la Justicia española y sendos pedidos de captura internacional. En el caso de Araquistáin hubo un pedido de extradición en 1993 que fue denegado por la justicia uruguaya, proceso al que se refería el gobierno español. Según trasmitieron a El País el ministro del Interior de España, Jorge Fernández Díaz, y el director del Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista, Joaquín Collado, la policía de España sigue trabajando en ambos casos y recolectando pruebas para que la extradición de ambos se concrete "tarde o temprano". A tales efectos dijeron a El País que esperan "cooperación" de Uruguay para dotar de agilidad y eficacia los instrumentados dados en acuerdos bilaterales para que los presuntos terroristas respondan por sus crímenes en España.

"En ocasiones, los procedimientos, por su propia complejidad, se alargan, pero, finalmente, y fruto del compromiso internacional y la responsabilidad para velar por la seguridad, libertad y garantía de los derechos de los ciudadanos, los delincuentes acaban ante la Justicia", sostuvo Collado.

Bonomi dio que los exintegrantes de ETA están "desactivados". "Están trabajando en Uruguay, incluso uno de ellos se casó con una uruguaya y tiene un hijo. No son un problema. Esas personas están haciendo una vida absolutamente normal en Uruguay", dijo.

Confirmó que España trasmitió preocupación por la actividad política que ETA realice en América una vez desmantelado su brazo armado.

El País Digital