Remersaro no pudo bajar sus marcas


Agarrada del cubo número 5, con la cabeza amenazando con perderse entre uno de sus brazos y con esconderse en el agua, Inés Remersaro se resiste a mirar la pantalla gigante. Sabe que llegó tercera en la primera serie de los 100 metros espalda de natación, pero anticipa claramente que no le fue como ella quería.

Sale del agua, avanza más lentamente. Va en la búsqueda del resultado, pero no quiere llegar. Cuando se enfrenta a la realidad sus brazos se vienen más abajo y por la manera en la que se retira hasta parece querer detener el tiempo. Retrocederlo para poder intentarlo de nuevo.
Atrás quedó la competencia en la que empezó bien, pero de inmediato perdió el ritmo en la competencia.
A Remersaro le tocó abrir las series clasificatorias sobre las 6 de la mañana de Uruguay junto con Mónica Ramírez de Andorra, Karen Vilorio de Honduras, Angelique Trinquier de Mónaco y Anahit Barseghyan de Armenia.

En los primeros 50 metros iba brazada a brazada y tirando parejo con las líderes. Después, cuando emprendió la vuelta, Remersaro empezó a quedarse. Y ahí mismo ya se notó que no iba a poder superar su marca. Los relojes la apuraban más de la cuenta, aunque ella, naturalmente, no se percataba del hecho.
La serie la ganó Vilorio con un registro de 1`06"38, estuvo a 20 milésimas de su mejor registro y segunda fue Ramírez con 1`07"72. Remersaro quedó tercera con 1`08"03, bastante lejos de la marca de 1`05"73 y también del récord nacional que sigue en poder de Serrana Fernández con una marca de 1`04"99.
Con ese tiempo, además, la uruguaya lo único que logró es superar a dos adversarias, que también fueron las que integraron su serie. Las demás nadaron con marcas por debajo de la suya, lo que la dejó en el lugar 41 de 43 participantes.
RÉCORD OLÍMPICO. La australiana Emily Seebohm impuso ayer un nuevo registro olímpico en la cuarta serie de los 100 metros espalda.
Seebohm nadó la distancia en 58"23, superando los 58"77 de la sudafricana Kirsty Coventry, logrado el 11 de agosto de 2008 en los Juegos Olímpicos de Beijing.
LONDRES | EDWARD PIÑÓN | Ovación

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