La carrera más pareja de la historia

Una moneda al aire podría acabar definiendo una de las tres plazas de Estados Unidos en los 100 metros femeninos de los Juegos Olímpicos de Londres.


En serio, esa es una de las alternativas que se barajan tras el insólito desenlace de la carrera del torneo clasificatorio en el que Estados Unidos define su equipo de atletismo.

Allyson Felix y Jeneba Tarmoh empataron en el tercer lugar de la prueba el fin de semana y tendrán que esperar varios días más para dilucidar la plaza restante en el equipo, acompañando a Carmelita Jeter y Tianna Madison

En un principio, Tarmoh pareció que era la tercera con su tiempo de 11,07 segundos, superando por una milésima a Felix.

Tarmoh recibió una banderita de Estados Unidos y hasta se presentó a la rueda de prensa junto con las primeras. Felix no ocultó su desencanto: "el cuarto es lo peor posible".

Felix, tres veces campeona mundial en los 200, apeló ante los jueces y éstos decidieron restarle la milésima para quedar así igualada con Tarmoh.

Los jueces debieron recurrir a la fotografía, que mostró una paridad total de los torsos de ambas al llegar a la meta. De hecho, se emplearon dos cámaras, una en el exterior y la otra en el interior, y ninguna pudo aclarar nada debido a que los brazos de ambas bloquearon los torsos.

Con el empate se desató la confusión sobre cómo resolver una circunstancia sin precedentes.

"Es increíble esta situación en un deporte con tanta historia", declaró Ato Boldon, el corredor de Trinidad y Tobago ganador de la medalla de plata en Sydney 2000 que ahora es comentarista de atletismo. "Es una locura e inconcebible que no se tuviese un reglamento para esto".

Tanto la Federación de Atletismo de Estados Unidos como el Comité Olímpico local tuvieron que improvisar.

La cosa se decidirá así:

Hay dos opciones. La primera es lanzar una moneda al aire. La segunda es disputar una carrera de desempate. Si ambas seleccionan la misma alternativa, pues esa será la que se utilizará. En el caso que discrepen, la opción será el desempate. Y si ambas declinan por cualquiera de las dos, entonces la moneda terciará.

El dilema es que no podrán hacerlo hasta después de disputar los 200 metros, cuya secuencia incluye jornadas el jueves, viernes y sábado de esta semana.

Si hay desempate, la fecha para hacerlo sería el 2 de julio.

Hay mucho en juego. Felix y Tarmoh son patrocinadas por Nike y clasificarse a unos Juegos Olímpicos abre las puertas a ingresos monetarios adicionales. Felix cuenta con más fama e imagen publicitaria que Tarmoh. Felix renunció a los 400 para concentrarse en los 100 y 200, con el fin de conseguir un oro olímpico individual que hasta ahora le ha sido esquivo.

Como corolario de todo, ambas tienen al mismo entrenador, Bobby Kersee.

"Nueve de 10 veces, la mayoría de los atletas no van a querer que una moneda decida", dijo Kersee. "¿Acaso uno quiere que un Súper Bowl, tras dos tiempos extra, los árbitros llamen a los dos entrenadores en la mitad del campo para decirles que van a lanzar una moneda para decidir el ganador?".

De momento, Kersee quiere que se cumpla con los 200 y luego que sus pupilas se pongan de acuerdo.

Todo esto ha confirmado la naturaleza despiadada y cruel de las eliminatorias estadounidenses en las que no media ningún tipo de favoritismo por antecedentes previos. Una caída o sentirse enfermo en el día decisivo puede dejar fuera a un campeón con todos los galones posibles.

Fue lo que ocurrió ni más ni menos que a Carl Lewis, quien quedó fuera del equipo para los 100 y 200 en los Juegos de Barcelona. Lewis, al menos, pudo competir en el salto de longitud y en el relevo 4x100 y se consagró campeón.

"Nuestras eliminatorias son las más difíciles del mundo, cualquier cosa puede pasar", comentó a la AP Michael Johnson, el mito de los 200 y 400. "Tenemos que ganarnos el puesto en el equipo, no te lo dan".

La competencia es fuerte y hasta abre el paso a marcas superlativas. Fue lo que hizo Ashton Eaton el sábado en Eugene, Oregon al batir el récord mundial del decatlón que había perdurado 11 años en manos del checo Roman Sebrle.

Y es un formato que se ha extendido a varios países. Ahora se acercan las de Jamaica y, claro está, no hay nada garantizado en que Usain Bolt, Yohan Blake y Asafa Powell, los tres astros de la velocidad, sufran un percance y puedan quedar marginados de Londres y de la final más anticipada de todas.