Advierten que se duplicará cifra de menores internados en un año


El establecimiento de una pena mínima de 12 meses a adolescentes infractores hará colapsar los hogares de internación. Los menores recluidos pasarían de 450 a 1.000, alerta un defensor de oficio de menores.


Según un estudio que hizo el defensor de oficio de menores, Daniel Sayagués Laso, al que accedió El País, la aplicación de una pena mínima de 12 meses de prisión a adolescentes -sin la creación de nuevas plazas de reclusión- hará que "el sistema colapse".

El proyecto de ley que modifica el Código de la Niñez y de la Adolescencia que llegó ayer al Parlamento establece una pena mínima de 12 meses y permite una salida anticipada con la mitad de la pena cumplida para los menores que cometan delitos graves (homicidio, violación, rapiña, secuestro, extorsión y tráfico de estupefacientes). Si se aprueba, en un mes se estaría duplicando la cantidad de adolescentes recluidos, dijo Sayagués Laso.

Según estadísticas oficiales, por día se interna a un adolescente de cada dos que rapiñan; si los números se mantienen constantes con la nueva ley se estarían internando el doble de menores por día.


En 2009 se internaron 1.000 adolescentes por rapiñas y se fugaron "una cantidad similar, lo que fue una cifra récord", dice el estudio. En 2010 descendieron las fugas a 800 y en 2011 cayeron a 300. Ahora, el cierre total de la "puerta giratoria" podría llevar por sí solo que el número de internados (entre 400 y 450) alcance a los 500.

Si a eso se suma el efecto que tendrá la reclusión de los menores por un mínimo de 12 meses (que puede ser reducido a seis) y el aumento de procesados registrado en el último cuatrimestre (por la aplicación de la ley que pena la tentativa de rapiña aprobada en 2011) "se provocará un aumento inmediato del número de los menores privados de libertad".

Para Sayagués Laso, "la suma de todos estos factores puede hacer que se llegue a corto plazo (menos de un año) a una cifra de 1.000 adolescentes recluidos".

De los cinco delitos graves para los que se establece la pena mínima de 12 meses, solo la rapiña tiene relevancia desde el punto de vista cuantitativo (la cometen el 70% de los menores). Otros como el homicidio representan un 5% y la violación y el copamiento son una cifra aún menor (0,1%) de las infracciones.

El defensor de oficio consideró que la no inclusión dentro del proyecto es una "válvula de escape", por la cual el 33% de los menores infractores que no son delincuentes habituales no sería internado "es un exceso muy grave". Sayagués dijo que a estos menores "se les daba una segunda oportunidad con una internación domiciliaria", pero con esta ley eso no se permitirá.

Como conclusión el estudio explica que "en pocos meses se producirá una duplicación del número de internados en centros que ya están desbordados". Además señala que "la falta de funcionarios suficientes producirá motines con destrucción de las plazas existentes y la negativa de los funcionarios a recibir más internados, como ha ocurrido durante los últimos cinco años de la administración anterior", puntualizó.

Sayagués Laso se preguntó cómo será posible la construcción -en menos de un año- de 300 nuevas plazas además de las otras 300 ya prometidas por el Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente (SIRPA), que aún no comenzaron a construirse. La falta de plazas y el aumento de los recluidos provocaría en el sistema de privación de libertad de adolescentes "un retroceso similar al producido en el de adultos luego del motín y destrucción de módulos del Comcar", señaló el defensor de oficio.

En este contexto, consideró que "los esfuerzos que se vienen haciendo por parte de las autoridades en mejorar el sistema se tornarían inútiles". Para Sayagués Laso, "lo razonable y sensato sería crear primero el número de plazas necesarias y recién luego establecer normas que impliquen el aumento de privados de libertad".

Ley atenta contra Código de la Niñez

El defensor de oficio Guillermo Paysée dijo a El País que con la ley que fija el mínimo de reclusión en los 12 meses para los menores infractores, en casos de delitos graves "la situación de los hogares que están sobrepasados se verá agravada".

"Con esto se prolonga una reclusión en condiciones que en la mayoría de los hogares es muy mala. Donde las horas de candado en algunos lugares son de 23 horas y a veces cuando el tiempo es malo ni siquiera tienen una hora de recreo", indicó. Además, señaló que hoy en los hogares "hay adolescentes que ya duermen en el piso porque los centros del INAU están sobrepasados". Con la nueva norma que ingresó al Parlamento, Paysée entiende que la superpoblación podría incrementarse.

Paysée explicó que la fijación de la pena mínima en 12 meses "va contra el espíritu del Código de la Niñez, porque el código habla de medidas socioeducativas en plazos razonables". En cambio, dijo que la nueva ley aplica "una visión penalística" al derecho penal juvenil. "No solo se atenta contra el espíritu del Código de la Niñez, sino que también contra la Convención de los Derechos del Niño", insistió.

Por su parte, el fiscal de menores Gilberto Rodríguez, dijo a El País que en una primera lectura el establecimiento de una pena mínima "podría generar una mayor población de adolescentes internados en hogares".

Cuatro clases de rapiñeros

En 2009 se registró un récord de la cantidad de rapiñas cometidas por menores, las cuales superaron a las cometidas por adultos (595 contra 528).

En 2010 se registraron 800 fugas de menores en hogares del INAU y en 2011 cayeron a 300. De forma paralela aumentaron los adolescentes privados de libertad de 300 a 450. El cierre total de la "puerta giratoria" implicaría que los internados lleguen a 500.

La rapiña es el principal delito cometido por menores (70%). El homicidio es el 5% y la violación y el copamiento representan el 0,1% del total de infracciones.

En 2010 la relación entre hurtos y rapiñas fue de 9 rapiñas por cada hurto cometido. En 2011, la cantidad de adolescentes procesados por rapiñas en Montevideo fue de 642. De los cuales 426 (66%) fueron privados de libertad y 216 (33%) no se les aplicó dicha medida.

En lo que va del año 2012, en el juzgado de tercer turno de Montevideo (uno de los cuatro que funciona en la capital del país) se procesaron a 95 menores. El 97% por hurtos y rapiñas y el 3% por otros delitos.

Hay cuatro perfiles de adolescentes infractores reconocidos por la Justicia. Los que alegan haber robado por necesidad debido a su situación socio-económica, los que justifican haber robado para financiar su adicción a la pasta base, los que dicen haber robado "por ser su medio de vida" o su "trabajo" (son reincidentes o están fugados del INAU). Por otra parte, están los que afirman no tener necesidad de hurtar porque "no les falta nada en su casa". Estos adolescentes suelen ser primarios y, en general, no vuelven a reincidir.
VALERIA GIL - El País Digital

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