"Narcoavión" sobrevoló territorio uruguayo durante treinta minutos

El avión privado Challenger 604, tripulado por argentinos, que el 2 de enero aterrizó en Barcelona con 944 kilos de droga, sobrevoló territorio uruguayo durante unos 30 minutos el pasado 1º de enero, cuando se dirigía a la Isla de Sal en Cabo Verde.

El jet privado. Fue capturado en España con 1 tonelada de cocaína.

La Justicia argentina que investiga dónde se embarcó la droga descartó que los narcos hayan incluido a Uruguay en una de sus escalas. Ayer, comenzaron a declarar en Argentina una veintena de oficiales y suboficiales de la Fuerza Aérea de ese país.
La aeronave, en cuyo interior se transportaba casi una tonelada de cocaína, había decolado a las 20.44 horas el pasado 1º de enero del aeropuerto de Ezeiza, con destino a la Isla de Sal en Cabo Verde. El plan de vuelo del piloto estaba en conocimiento de las autoridades aeronáuticas tanto argentinas como uruguayas. Según confiaron a LA REPUBLICA fuentes de la aviación, la aeronave "sobrevoló territorio uruguayo durante unos treinta minutos", en su ruta hacia el Océano Atlántico. El pasaje de la aeronave matrícula norteamericana N600AM por el cielo uruguayo fue reportado por los controladores aéreos de nuestro país. "Nos bloqueó por arriba del aeropuerto de Melo", ya entrada la noche del 1º de enero, confió una fuente aeronáutica, refiriéndose al sobrevuelo del avión Challenger. Las fuentes aseguraron que la aeronave no efectuó ninguna escala en territorio nacional. El caso generó en Argentina un verdadero revuelo y provocó el relevo del jefe de la Base Aérea Militar de Morón que está en la mira de los investigadores argentinos.

Bajo la lupa

Ayer, oficiales y suboficiales de la Fuerza Aérea argentina comenzaron a declarar en Tribunales como testigos en la causa donde se busca determinar si los 944 kilos de cocaína secuestrados en España fueron cargados en la Argentina, mientras el comodoro Juan José Janer asumió como nuevo jefe de la Base Aérea Militar de Morón. El juez en lo Penal Económico Alejandro Catania inició la ronda de declaraciones testimoniales de 18 oficiales de la Fuerza Aérea que prestan servicio en Morón y que continuarán mañana y el lunes. El objetivo del juez es preguntar sobre los controles en la base, los accesos al lugar y los movimientos del avión Challenger 604 que estuvo en esa estación entre el 5 de noviembre y el 30 de diciembre pasado. La nave en la que viajó la droga fue tripulada por los hermanos Eduardo y Gustavo Juliá y Matías Miret, detenidos el 2 de enero cuando arribaron al aeropuerto de El Prat, en Barcelona. La sospecha es que los 944 kilos de cocaína fueron cargados en Morón, donde no hay cámaras de seguridad. La Fuerza Aérea y la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), que comparten la administración del predio, deslindaron responsabilidades. El primer integrante de la Fuerza Aérea en declarar fue Jorge Ayerdi (el relevado jefe de la base militar reemplazado por Janer), quien dijo que en noviembre reforzó los controles de acceso de gente en el portón principal de la base.
Por su parte, el ministro de Defensa, Arturo Puricelli, desligó a la Fuerza Aérea del escándalo cuando aseguró en la víspera que el arma "no está involucrada" y sostuvo que la única "vinculación" es que el padre de dos de los detenidos, el brigadier José Juliá, "fue jefe del Estado Mayor (de la Aeronáutica) en la década del '90". Además, los Juliá son hermanos del comodoro Guillermo Juliá, quien fue puesto en disponibilidad por el gobierno. Los hermanos Juliá y Miret siguen detenidos en España, donde la causa respectiva se encuentra todavía bajo secreto de sumario.