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Con miles de sonrisas, juegos y aprendizajes, el Programa Educativo de Verano 2015 llega a su cierre


Chapuzones en el mar, paseos, deportes, actividades lúdicas y recreativas, música, bailes, cocina y sobre todo, un espacio de mayor tiempo pedagógico, fue lo que se vivió en las intensas y alegres jornadas de la 25ª edición del Programa Educativo de Verano, que desde el pasado 13 de enero alcanzó a más de 10.300 niños de 135 escuelas de todo el país y que ahora finaliza con el saldo positivo de seguir trabajando en la propuesta de ofrecerle a los alumnos actividades de recreación y de apoyo para mejorar su rendimiento escolar 

La Escuela N° 124 de Rincón de Melilla servirá como escenario para el cierre del Programa Educativo de Verano (PEV) 2015, siendo un momento más que propicio para pasar en limpio todo lo que se ha realizado desde el pasado 13 de enero a través de este proyecto, cuyas actividades se desarrollaron de lunes a viernes, de 8 a 13 horas, en más de 130 escuelas de todo el país, alcanzando a más de 10.300 alumnos que, en plenas vacaciones, siguieron aprendiendo y divirtiéndose, adquiriendo buenos hábitos de convivencia y socialización, así como también más tiempo pedagógico con actividades vinculadas a Matemáticas y Lengua, entre otras.

Dicho de otro modo, si bien el PEV suele estar asociado a que los niños realizan sólo actividades lúdicas y recreativas, lo cierto es que, además de esos espacios libres de esparcimiento, los chicos de entre 4 y 12 años de edad que participaron de este proyecto también aprendieron, de la mano de maestros y directores, muchas otras tareas curriculares que les serán muy útiles a partir del próximo 2 de marzo, cuando comience un nuevo año lectivo.

Por ejemplo, entre las diversas experiencias llevadas adelante durante el PEV 2015, puede mencionarse el hecho de que durante este tiempo se llevó a cabo el período de adaptación de los niños de nivel inicial que este año se incorporan por primera vez a la escuela. Sin duda no es lo mismo que la etapa de adaptación de un niño de nivel inicial recaiga en el aula a que lo haga en un lugar abierto como lo fue la playa de Pajas Blancas, donde algunos chiquitos hicieron esta experiencia. 

En este sentido, el PEV se convierte en una herramienta más que propicia para llevar adelante esta instancia u otra, como por ejemplo, en 24 de las 136 escuelas que participaron este año se incorporaron actividades de “Primer Ciclo”, cuyo propósito ha sido contribuir a que los niños de 1° y 2° año puedan acelerar sus aprendizajes en escritura, lectura y cálculo. Esto se debe a que una de las principales características del programa es que cada escuela diseñó un plan diferente para desarrollar durante el verano, que por un lado estuvo vinculado a actividades generales del período de vacaciones (como fueron los paseos a la playa) y por otro vinculado a las particularidades de cada escuela con las necesidades de su población.  

Además de estas actividades en las que maestros y directores trabajaron con total dedicación y vocación, varias empresas se acercaron al Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) para sumar su granito de arena al PEV 2015, como fue el caso de Unilever, que a través de su marca Lifebuoy ofreció dos jornadas llenas de color y entusiasmo en la sala mayor del Teatro MovieCenter para más de 900 alumnos de 10 escuelas que pudieron disfrutar de la obra “Lifebuoy versus Las Bacterias”, un espectáculo que acercó a los niños un claro mensaje de higiene y salud. 

En suma, en vacaciones se sigue aprendiendo, y el Programa Educativo de Verano es un proyecto que se ha convertido a lo largo de 25 años en un actor activo para seguir mejorando el rendimiento escolar de nuestros niños.

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