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Los datos muestran que es necesario progresar en muchas áreas y en todas las regiones para lograr la igualdad de género en el mercado laboral.
El análisis, que examina la remuneración, la participación en la gestión y las oportunidades para las mujeres jóvenes, pone de relieve los desafíos que enfrentamos en el Día Internacional de la Paridad en el Trabajo, que tiene por objeto defender el valor de la diversidad y crear conciencia de la persistente desigualdad en el lugar de trabajo.
Además de que las mujeres suelen recibir un salario inferior al de los hombres en la misma ocupación, los datos muestran dónde son mayores las diferencias. La mediana de la brecha salarial entre los géneros en 115 países que disponen de datos es del 14% en favor de los hombres. Y las ocupaciones dominadas por los hombres tienen primas salariales aún más altas para los hombres. Por ejemplo, el 73% de los gerentes y el 77% de los trabajadores del sector de la artesanía y el comercio son hombres según las estimaciones, y estos son los dos grupos ocupacionales en los que los hombres disfrutan de las mayores primas salariales.
Techo de vidrio
En todo el mundo hay muchas menos mujeres que hombres en la gestión, y los progresos en este ámbito desde el cambio de siglo han sido prácticamente inexistentes.
Las mujeres constituyen el 39% de los empleados del mundo según las estimaciones, pero sólo el 27% de los trabajadores directivos y esa proporción de mujeres directivas apenas ha cambiado en dos décadas.
En 2018, la proporción de mujeres directivas era más alta en América Latina y el Caribe, con un 39%, y en América del Norte y Europa, con alrededor de un 37%. Asia Occidental y África del Norte tuvieron las participaciones más bajas con sólo el 12%.
Un comienzo difícil
Si bien se ha debatido mucho sobre el cierre de las brechas de género y la mejora del medio ambiente para las generaciones actuales y futuras, esto aún no se ha confirmado en los datos. Las mujeres jóvenes de todo el mundo son dejadas rutinariamente atrás.
Las mujeres de entre 15 y 24 años tienen más probabilidades de estar desempleadas que los hombres de la misma franja de edad, con grandes diferencias en algunas partes del mundo. En los Estados Árabes, la tasa de desocupación de mujeres jóvenes ha sido aproximadamente el doble que la de los hombres jóvenes durante la última década.
También hay una tasa de inactividad mucho más alta para las mujeres jóvenes que para los hombres jóvenes en todas las regiones, y más mujeres jóvenes que hombres jóvenes no están en ocupación, educación y la formación profesional (NEET), especialmente en las zonas rurales. A nivel mundial, la tasa de jóvenes NEET fue del 30% para las mujeres en comparación con el 13% para los hombres, según las estimaciones para 2018.
En algunos países esta brecha en la participación en el mercado laboral se debe a normas restrictivas de género y culturales, que dejan a las mujeres más limitadas en cuanto a sus opciones para buscar un empleo remunerado, según el informe "Trends for Women".
Estas cifras ofrecen una visión general de lo mucho que les queda por recorrer a las mujeres para lograr la igualdad en el mercado laboral, en particular a las jóvenes.
El Día Internacional de la Paridad en el Trabajo cumple ahora su tercer año, después de haber comenzado en 2017, lo cual es una señal de que estos temas están cobrando importancia. No obstante, las estadísticas deberían dar que pensar a los responsables políticos, mostrando cómo las mujeres de todo el mundo siguen enfrentándose a barreras en el mercado laboral a lo largo de su vida laboral.
©ILOSTAT
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