Se fue para siempre "El Verdugo"

Pedro Virgilio Rocha Franchetti nació en Salto un 3 de diciembre y falleció un día antes de cumplir 71 años en San Pablo. Fue conocido con el apodo de “El Verdugo” con el que lo identificó el relator Heber Pinto en la década del sesenta, por su potente remate a la carrera que “fusilaba” arqueros.

Jugó 52 partidos con la Seleción Uruguaya entre los años 1961 y 1974, habiendo vestido la casaca Celeste en los Mundiales de 1962; 1966; 1970 y 1974. Aún se recuerda su temprana lesión ante Israel en el debut de Uruguay en México 70, que lo radió del torneo privando a la Selección Nacional de un excepcional jugador que estaba en la cima de su carrera.

Los 21 años que paseó su estilo y clase en la canchas se dividieron en Peñarol y San Pablo básicamente aunque también jugó para Curitiba, Palmeiras Bangú y Monterrey de México.

Con Peñarol ganó los campeonatos Uruguayos de 1959, 60, 61, 62, 64, 65, 67 y 68, además  ganó tres veces la Copa Libertadores (1960, 1961 y 1966), la Copa Intercontinental en 1961 y 1966, Supercopa de Campeones de 1969 y dos ediciones de la Copa Competencia uruguaya en 1964 y 1967. Con San Pablo ganó dos campeonatos Paulistas en 1971 y 1975, también la serie A (actual Brasileirao) en 1977 y el Campeonato Paranaense en 1978.

Goleador del Campeonato Uruguayo 1963, 1965 y 1968 Goleador de las Clasificatorias Sudamericanas de 1965. 

Mejor jugador de la Copa América 1967, ganando la final Uruguay con gol suyo ante Argentina.

Goleador de la Supercopa de Campeones 1968 -1969  

Goleador del Campeonato Brasileño 1972

Goleador de la Copa Libertadores 1974

Convirtió 213 goles en su carrera y fue elegido en la Selección B de todos los tiempos convocada por la serie editorial “100 años de Fútbol”.

La misma integrada por el voto de los periodistas formaba con:

Paz; William Martínez y Matosas; L. Andrade, Lorenzo y Gambetta; Abaddie, Rocha, Petrone, Porta y Zapiraín.

Recordamos que la Selección A, la integraban:

Mazurkiewicz, Nasazzi y Manuel Varela, Andrade, O. Varela y Gestido; Ghiggia, Scarone; Piendibene, Schiaffino y Romano.

Erasmo Fried en una de sus crónicas por 1968 lo describía así: “Es difícil encontrar un jugador con su carácter y temperamento, que haya adosado a su extraordinaria riqueza técnica el temple que exige la adversidad, incorporando - a la madurez futbolística de un hombre de características extraordinarias -  calidad, valor, fuerza, paso elegante y cabeza levantada para redondear una personalidad futbolística que le dan un nuevo brillo a este Pedro Virgilio Rocha versión Mundial. El genio ahora transpira y vincula a sus jugadas y remates asombrosos, la regularidad portentosa de un talento nato que no baja los brazos y asume su condición de calidad con sacrificio asumiendo la responsabilidad de mantener a todo el equipo sobre sus hombros. Una versión renovada y completa de un genial jugador.”

Una gloria del fútbol uruguayo que parte para formar parte de la eternidad de los Campeones que perduran como guardianes de la historia. 

Fuente: "100 años de Fútbol" - "Historias de la Copa Libertadores"