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La ley de riego incidirá en la economía de forma comparable con el efecto de la ley forestal, consideró Aguerre.

“En 2017 llovió como si hubiéramos regado y, porque llovió de esa manera, tenemos la producción récord de soja, maíz y de faena en el primer semestre del año. Eso nos demuestra claramente que con agua es más fácil producir, diversificar, intensificar y desarrollarnos”, explicó el ministro Tabaré Aguerre. “El proyecto de ley sobre riego será lo que fue la ley forestal para Uruguay en la década de 1990”, afirmó.


“El proyecto de ley sobre riego será lo que fue la ley forestal para Uruguay en la década de 1990. Es una posibilidad de aumentar y de diversificar la producción, aumentar la productividad, capturar más valor y recibir inversiones nacionales y extranjeras”, explicó el ministro de Ganadería, Tabaré Aguerre, en declaraciones a medios informativos, tras comparecer este martes 4 ante la Comisión de Presupuesto, compuesta con Hacienda de la Cámara de Representantes.

Según señaló, la ley forestal permitió que nuestro país preservara montes naturales y a su vez aumentara la cantidad de hectáreas plantadas de montes artificiales, tópicos que ningún otro país de América del Sur consiguió confeccionar.  

En ese sentido, indicó que asegurar los recursos hídricos “es poner un segundo piso” a la producción agropecuaria, aprovechando “inteligentemente” la oportunidad de que en el mundo hay 9.000 millones de habitantes que demandan más comida con mejor calidad.

Explicó que Uruguay utiliza menos del 5 % del agua que recibe por lluvias y que en el país llueve 1.500 litros por metro cuadrado y por año. De esa cantidad, según prosiguió, se escurren por cañadas o arroyos aproximadamente 600 litros por metro cuadrado y, de esos 600 litros, se utiliza menos del 4 % tanto en riego como en las represas hidroeléctricas, a excepción de Salto Grande. En vigencia de la ley, ese porcentaje aumentaría considerablemente, debido a que las represas en los predios lo harían posible.

“Si consideramos este año con una producción récord de soja y lo comparamos con la producción de los últimos 10, vamos a ver que la producción estuvo 1.000 kilos arriba. El promedio histórico son 2.050 kilos y este año tuvimos 3.026”, expresó Aguerre.

“Este año llovió como si hubiéramos regado y, porque llovió de esa manera, tenemos la producción de soja y maíz. También tenemos el récord de faena en el primer semestre del año. Eso nos demuestra claramente que con agua es más fácil producir, diversificar, intensificar y desarrollarnos”, acentúo el ministro de Ganadería.  

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